Thursday, November 29, 2012

La boda de Iselda Beatriz Menéndez Castro y Jorge Eduardo Muñoz Rubio


Iselda Beatriz Menéndez Castro fue hija de Rubén Menéndez Romero, nieta de Carlos Ricardo Menéndez González y bisnieta de don Antonio Menéndez de la Peña.

El domingo 1 de julio de 1951, el Diario de Yucatán publicó la siguiente nota sobre su boda con el Dr. Jorge Eduardo Muñoz Rubio:

Enlace Muñoz Rubio - Menéndez Castro

Foto: Diario de Yucatán
...la novia lucía elegante traje de organdí suizo...

El oro reluciente de la mañana estival prestaba ayer al recolecto templo de Santa Ana, en el exterior, esa luz que, al bañar las piedras seculares de las iglesias emeritenses, parece suavizarse en matices que invitan en el atrio a la espera amable y sin prisa. En el interior, finos cortinajes, aristocráticas flores, cirios que ardían en vigilante ofrenda al Señor, comunicaban al altar la elegante y sencilla ornamentación que en el cristiano sacramento del matrimonio es anuncio cierto de promesa solemne, de la fidelidad de un pacto que sólo termina con la existencia. Por eso también a la altura del adorno, se sumaba en las paredes laterales de la nave una fina veta verde de esperanza... Fue el escenario en que unieron sus destinos el joven Dr. Jorge Eduardo Muñoz Rubio y la Srita Iselda Beatriz Menéndez Castro.

Del brazo de su señor padre Don Rubén Menéndez-Romero, entró la gentil desposada en el templo, Realzaba su juvenil belleza con elegante traje de organdí suizo, totalmente bordado a mano, velo en tul chantilly y ramo de orquídeas blancas con listones de satén. Cuatro diminutos pajecillos la precedían: Roberto Vega Carrillo, Francisco Javier Acevedo Menéndez, Hernán Raúl Menéndez Rodríguez y Alberto Rubén Menéndez Navarrete, y seguían las madrinas de ramo y lazo, Sritas. María Teresa Muñoz Rubio y Gilda de las Mercedes Menéndez Castro. La marcha nupcial de Mendelssohn, interpretada por el conjunto del maestro Conrado Peniche Sierra, acompañó el cortejo hasta el altar. Allí esperaban los padrinos: por el novio, su señora madre Da. María Rubio viuda de Muñoz Solís y Don Gustavo Vega Ibarra, y por la novia, sus padres Don Rubén Menéndez-Romero y Da. Mercedes Castro de Menéndez. Dio la bendición nupcial y ofició en la Misa d Velación el Pbro. Lic. Don Joaquín H. Ricalde Sansores, quien dirigió después a los contrayentes sencillo y emotivo fervorín sobre los deberes y obligaciones del matrimonio cristiano, y luego, revestido de todos sus ornamentos sacerdotales, dio la bendición con el Santísimo. Ayudaron como acólitos los niños Antonio Menéndez Torre, Joaquín Acevedo Menéndez y Nicolás Carlos Moguel Menéndez.

Durante la ceremonia, el conjunto del maestro Peniche Sierra había interpretado música sacra de Frank y de Torres, y a la salida del cortejo ejecutó la marcha nupcial de Wagner. En el propio atrio del templo, la feliz pareja recibió muchedumbre de parabienes, que sus parientes y amistades les reiteraron durante la recepción íntima que los padres de la novia ofrecieron en su residencia de la Avenida Colón. Los nuevos esposos recibieron valiosos presentes de boda y ayer mismo, en el avión directo, salieron para Acapulco, vía México, donde pasarán su luna de miel.

La ceremonia civil se efectuó el martes último, en la residencia de los esposos Menéndez-Castro y ante el director del ramo, Lic. Ermilo García Esquivel. Atestiguaron el acto Don Carlos R. Menéndez, Don Enrique Muñoz Rubio y Don Fernando Castro Cámara.

Renovamos a la joven pareja nuestros cordiales votos por su dicha.

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